En la UD4 de Caricuao, en un edificio de 19 apartamentos, los vecinos soportaron seis años con una trabajadora residencial (conserje) con su familia (esposo, dos hijos y su hermana embarazada) ocupando el inmueble, cancelando su salario regularmente pero sin cumplir con sus obligaciones porque el Ministerio de Trabajo falló a su favor en un pliego laboral que introdujo la junta de condominio por una serie de irregularidades.
"No se trataba que teníamos que pagar más en condominio sino que se convirtió en un problema social para el edificio. Falsificó reposos del IVSS y no trabajaba bajo ese argumento. Ponía a los niños menores a limpiar y lo último que hizo fue traerse a vivir a la hermana que estaba embarazada ", afirmó Manuela Ramírez, vecina del edificio.
Relata que lograron desalojar el apartamento que era de conserjería cuando "ella (la conserje) salió al interior del país por unos días y los vecinos enfurecidos les sacaron todas sus pertenencias y soldaron la puerta. Ella puso la denuncia a la Inspectoría pero cuando fueron los fiscales del trabajo a inspeccionar los vecinos impidieron la actuación de los funcionarios. Ahora se encargan de la limpieza tres vecinas de viven en el edificio, de sacar la basura se ocupa la junta de condominio; el apartamento se tiene como depósito para las cosas de limpieza y la decisión fue que más nunca van a contratar a alguien".
Testimonios como estos son cada día más frecuentes en los últimos meses en los inmuebles de Caracas.Según Enrique Herrera, abogado y corredor inmobiliario, entre 10 y 20 % de los edificios del Este de la ciudad, según la zona, han eliminado la figura de Trabajador Residencial. La tendencia es que se contrate a terceras personas, pero sin que tenga que vivir en el edificio o en su defecto a empresas que hacen mantenimiento.
"El temor que tienen los vecinos es que las consejerías se conviertan en viviendas multifamiliares, y además se ha desvirtuado los beneficios que tienen a raíz de la aprobación de la Ley Especial para la Dignificación de Trabajadores Residenciales a probada en el 2011.
A esto se une la reforma de la Ley Orgánica del Trabajo, los Trabajadores y las Trabajadoras (LOTTT) que comenzó a regir este año", afirmó por su parte, Tibaire Altuve, especialista en Derecho Condominial. Afirma que los condominios ubicados en la región central tienen una tendencia mayor a contratar servicios outsorcing que no solo hagan limpieza sino que también cubran otras tareas relativas a la operatividad de la edificación.
Indicó que la experiencia que se maneja con el grupo de conserjes egresados del Curso de Gerencia dictado por la Escuela de Ciudadanos y Micondominio.com (ONG que asesora y capacita a vecinos en todo lo relacionado a juntas de condominios), es que a raíz de la entrada en vigencia de la Ley para de la Trabajadores Residenciales de 45 conserjes contratadas por sus asesorados, cesaron en sus funciones a 15.
Elías Santana, coordinador de Micondominio.com, considera que para tomar la decisión de eliminar la figura de trabajador residencial hay que evaluar varios parámetros que van desde seguridad hasta los gastos de condominio.
Las administradoras también coinciden en que en los últimos tres años ha aumentado la contratación de empresas de mantenimiento para edificios, sobre todo en los inmuebles nuevos, a pesar de que el monto de los recibos de condominio se quintuplican. "Pero nuestros clientes prefieren gastar más que tener problemas legales con los conserjes", afirmó la vocera de una de las administradora más grandes del país y quien prefiere omitir su identidad. En promedio 20% de los inmuebles de Caracas han sustituido los trabajadores residenciales, sobre todo en el este de Caracas, afirmó.
Ante este auge, grandes empresas de mantenimiento como la Fuller han ampliado sus ofertas y ahora tienen el Plan Condominio Full Total que consiste en la elaboración de contratos adaptados a las necesidades de cada condominio, según reseña su pagina web.
De los 200 edificios del casco de Chacao 40% han sustituidos a los conserjes para evitar problemas legales y ahorrar los gastos en las facturas de condominio, y en su mayoría son inmuebles que no pasan de cinco pisos, afirma Georattsy Urbano, vecina del casco de Chacao y vocera del consejo comunal de la zona 3. En la urbanizaci´on Manzanare, en Baruta, de una cuadra de 10 edificios cuatro no tienen trabajadores residenciales. "La conserje de nuestro edificio se marchó y decidimos contratar una empresa y la basura la sacan los vigilantes, pero nos quitamos ese dolor de cabeza", afirmó una vecina que no se identificó.
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