Big Data, pilar fundamental para el desarrollo de las ciudades inteligentes

El desarrollo de las ciudades inteligentes o smartcities es cada día más importante. (Imagen: CS)  Eficiencia en el transporte, recursos energéticos e hídricos, turismo, planificación de eventos... Todo un universo de posibilidades enfocados a la mejora de la calidad de vida del ciudadano. El estallido de la burbuja inmobiliaria en 2008, más allá del efecto devastador para la economía y al empleo, conllevó el desarrollo de nuevos planteamientos. En esos años se había crecido de forma expansiva, en muchas ocasiones sin tener en cuenta otros condicionantes. Pero la realidad es que muchas ciudades no necesitan más viviendas, las requieren de mayor calidad y en mejores entornos urbanos. Con todo ello, el desarrollo de las ciudades inteligentes o smart cities es cada día más importante. El crecimiento y mejora de la sociedad, en el que la que ocupa un lugar de gran importancia el entorno urbano, estará basado en una optimización de los recursos físicos y económicos. Pero además, el despliegue de ciudad eficiente es una gran oportunidad para el desarrollo profesional y laboral, más allá del crecimiento urbano extensivo, sin ton ni son. La base de todo este desarrollo está en la captación y la interpretación de aquellos datos que permiten entender la ciudad desde esta nueva perspectiva de eficiencia. El uso de las Tecnologías de la Información y Comunicación (TICs) y de bases de datos llevará a un ahorro en los costes, mejora la calidad de los servicios públicos y con ello, beneficios económicos. Todo ello tiene una aplicación rápida en aspectos como la eficiencia en los sistemas de transporte, optimización en la mejora de los recursos energéticos, turismo o planificación de eventos, entre otros muchos. Eficiencia en el transporte Es uno de los puntos fundamentales por la gran cantidad de efectos positivos que genera. Económicos, con un menor coste y más ingresos (con ganancias de productividad) pero también ambientales, por las menores emisiones contaminantes. Por todo ello, una de las primeras aplicaciones del Big Data para ciudades inteligentes está en la monitorización del flujo de vehículos particulares y del uso del transporte público. Los datos llegarán a tiempo real y permitirán optimizar el flujo del tráfico, disminuir atascos o priorizar rutas que se pueden usar en caso de emergencia. En el caso del transporte público se podrá optimizar los recursos, dejando de existir líneas infrautilizadas y trasladando los mismos donde más se necesitan. Recursos Energéticos e hídricos Otro de los puntos fundamentales está en dar respuesta a la necesidad de análisis, optimización, predicción, simulación o recomendación en el uso de los recursos energéticos. Con ello se podrá detectar incidencias energéticas, predecir demanda y determinación de patrones de consumo y eficiencia energética, entre otras. En las ciudades inteligentes, la captación constante de información por parte de los sistemas de medida permite un alto grado de control sobre el consumo energético, incluyendo la iluminación de la vía pública, el riego de parques y jardines o el transporte urbano. Turismo El turismo es una de las variables fundamentales para el desarrollo económico de muchas ciudades. Estas buscarán no sólo atraer más visitantes, si no también la satisfacción del mismo y su gasto. Para conseguirlo es fundamental la aplicación de sistemas de Big Data que recojan y procesen datos con su posterior análisis. Por ejemplo es de gran utilidad obtener información sobre la actividad comercial de los turistas y llegar a conocerlos a partir de sus hábitos, que turistas son los que más gastan. Todos esta información permite a la ciudad posicionar mejor su oferta turística en los mercados de origen de los visitantes y ser capaz de llegar al turista con una propuesta que se adapte a sus gustos y costumbres. Planificación de eventos Los eventos culturales no sólo tienen como fin satisfacer al visitante de fuera, lo son principalmente para el habitante de la ciudad. Con el mejor análisis de los gustos de los ciudadanos se consigue uno de los aspectos fundamentales a la hora de ofrecer una oferta diferenciada, personalizar el mensaje. El Big Data ayuda a los organizadores de eventos a lograr un ambiente mucho más interactivo y, sobretodo, una comunicación más segmentada y personalizada para conseguir un mayor nivel de satisfacción. Todo un universo de posibilidades enfocados a la mejora de la calidad de vida del ciudadano. Fuente: hechosdehoy.com