lunes, 12 de enero de 2015

Venezuela: Medidas fiscales entran poco a poco en el ruedo


Foto Cortesía: El Mundo, Economía y Negocios
  A lo largo de 2014, muchos analistas internacionales advirtieron sobre el fin del ciclo alcista de las materias primas. 

Ante este escenario, voceros oficiales en materia económica apuntaron que el presupuesto 2015 sería construido sobre la base de supuestos “prudentes”.

Pero, el presidente Nicolás Maduro prometió enfáticamente que el gasto social y los proyectos de inversión pública no corrían peligro.

No obstante, la caída de los precios petroleros ha sido más fuerte de lo que se presagiaba. Por lo que el Mandatario nacional, reconoció que su Gobierno se ha visto “obligado a revisar todos los planes de inversión... ( ) Todos los días estamos perfeccionando los planes para proteger a la patria”, dijo, al tiempo que, dio respaldo al gasto social.

Empresas de análisis económico, como Ecoanalítica, señalaron que el Gobierno tendrá que financiar un déficit fiscal de entre $16.000 y $22.000 millones, según se presente el escenario petrolero en lo que resta del ejercicio.

Además, el entorno económico venezolano venía presentando problemas propios, anteriores al descenso de las cotizaciones del crudo. El primero es la alta y persistente inflación que, en 2013, cerró en 56 % y el año pasado subió a 64 % -estimación del Banco Central de Venezuela.

Junto con el aumento indetenible y voraz de los precios, se profundizó el fenómeno de escasez de bienes esenciales, sobre el que no existen estadísticas oficiales, pero, para citar solo un caso, la Cámara Venezolana de Farmacias advirtió sobre un indicador de desabastecimiento cercano a 70 %, al cierre de 2014.

Inclusive, la economía venía dando señales claras de desaceleración desde finales de 2012. En 2013, el crecimiento del PIB apenas superó 1 % y, en 2014, los tres primeros trimestres del año concluyeron con una contracción de 4 %.

El jefe de Estado señaló que las causas de estos problemas son básicamente dos: las protestas violentas de principios de 2014, las cuales habrían causado problemas graves en las cadenas de suministro y la “guerra económica” de sectores no siempre claramente identificados, que propician el contrabando y el acaparamiento para “desestabilizar” al Gobierno.

Maduro ha insistido en que el evidente deterioro del cuadro económico del país es completamente inducido, mientras tanto las presiones inflacionarias y su correlato devaluacionista de la moneda nacional fueron en aumento.

El diferencial entre los tipos de cambio oficiales y el denominado dólar “paralelo” ha llegado a niveles inéditos y diversos economistas, incluyendo algunos afines al Gobierno, señalan que es hora de revisar para modificar el régimen cambiario controlado, vigente desde 2003, en función de ir a un modelo que facilite el acceso a las divisas.

El sistema de tres tipos de cambio ha fallado en satisfacer oportunamente la demanda de divisas, al extremo que, por ejemplo, Conindustria reitera que el retraso promedio en la liquidación de los dólares autorizados pasa de los 200 días; el Sicad I no hace subastas regulares desde octubre de 2014 y la oferta del Sicad II bajó de un promedio diario de $43 millones en abril pasado a una media de apenas $18 millones en diciembre.

Diversos sectores económicos reivindican compromisos de liquidación de divisas que, según los cálculos de Ecoanalítica, siguen superando los $20.000 millones.

Lo dicho y lo hecho
El presidente Nicolás Maduro en distintas comparecencias públicas ha dicho que el Gobierno tiene una hoja de ruta clara para enfrentar estos problemas, al tiempo que ha desestimado la existencia de una crisis real.

Sin embargo, los trazos fundamentales de esta estrategia no han sido revelados en detalle y solo se han tomado medidas puntuales que simplemente intentan mejorar la situación fiscal.

Fuente: Elmundo.com.ve

No hay comentarios:

Publicar un comentario