martes, 23 de julio de 2013

INTERNACIONALES: ARGENTINA

Argentinos siguen apostando a Miami

rionegro.com.ar
Argentina ⁄  La plaza inmobiliaria de Estados Unidos (EE. UU.) se abrió después de la crisis de las hipotecas subprime (de baja calidad) iniciada en dicho país a mediados del 2007. Como consecuencia directa, los precios de las propiedades se desplomaron, lo cual abrió una ventana para que en los años siguientes inversores de todo el mundo pudieran adquirir un inmueble a un valor muy bajo y especular con una apreciación en la medida en que la economía norteamericana fuese recuperando su fortaleza.

Paralelamente, en la Argentina, los precios del m² subían haciendo aún más atractiva la idea de comprar en el país del Norte e incentivando la fuga de capitales.

Si además se tiene en cuenta que tanto EE. UU. como Uruguay son dos de los destinos más importantes para los fondos excedentes que salen del país, no resulta sorprendente que la inversión de argentinos en el mercado inmobiliario estadounidense haya alcanzado los 2.000 millones de dólares entre marzo del 2012 y marzo del 2013. Esta magnitud se desprende de un informe reciente de la consultora Reporte Inmobiliario sobre la base de un relevamiento de la Asociación Nacional de Desarrolladores Inmobiliarios de los Estados Unidos (NARpor sus siglas en inglés). El estudio realizado por esta última indica que el 6,3% de las ventas de viviendas en dicho país fueron hechas a compradores extranjeros. El monto total de estas operaciones ascendió a 68,2 miles de millones de dólares, siendo el estado de La Florida el destino más elegido por los foráneos, seguido por California y Texas. De acuerdo al trabajo publicado por la NAR, la Argentina pasó de explicar el 1% de las ventas en el 2007 al 2% en el 2011, para ubicarse actualmente en el valor más alto: 3%. De esta manera, los capitales nacionales superaron, por primera vez desde el 2007, los provenientes de Brasil, Venezuela, Rusia y Corea. El ranking lo lidera Canadá con un 23% del total de las transacciones efectuadas por extranjeros (ver infograma).

Lo preocupante no es el ascenso per se, sino que ocurre al mismo tiempo que en nuestro país el sector en cuestión atraviesa una profunda crisis. De hecho, ésta constituye uno de los motivos que llevaron al gobierno nacional a ensayar un nuevo blanqueo de capitales, que entre los objetivos que persigue se destaca el de estimular la compra-venta de inmuebles. El problema es que en las tres semanas de vida del Cedin (el instrumento creado para el fin mencionado), el mercado no muestra señales de aceptación y la suma involucrada en esta operatoria sería inferior a los u$s 10 millones de dólares.

Otra cuestión clave a considerar es que los 2.000 millones que algunos argentinos decidieron colocar en Estados Unidos representarían una parte mínima del total invertido, dado que contempla solamente los fondos que están en blanco.

Al respecto, estimaciones de distintos brokers internacionales indicarían que la inversión inmobiliaria es mucho mayor y que el piso se ubicaría en el orden de los 10.000 millones de dólares. Más allá de que esto no deja de ser un cálculo estadístico del sector privado, es una muestra más de que los ciudadanos argentinos eligen libremente acumular ahorro fuera del país, en lugar de, por ejemplo, destinarlos a desarrollos inmobiliarios locales. Nuevamente, sobre la base de estimaciones privadas, el stock de divisas que permanecerían en el exterior sería superior a los 200.000 millones de dólares.

Desde las provincias de Río Negro y Neuquén, siempre se ha hecho un aporte a este "fondo verde" que el gobierno ahora está intentando repatriar, debido fundamentalmente a que las principales actividades económicas de la región tienen una vinculación directa con el sector transable, favoreciendo así la formación de activos externos. Actualmente parte de esos recursos regresan al país para aprovechar la brecha cambiaria y darle un poco de oxígeno a la vapuleada rentabilidad.
 

No hay comentarios:

Publicar un comentario