martes, 15 de octubre de 2013

VENEZUELA: MISION VIVIENDA

Por peligro de colapso derriban edificio de la Misión Vivienda
Cerca de 60 familias se vieron obligadas a abandonar el conjunto residencial localizado en El Morro / Raúl Romero
Al edificio número 5 de la terraza 10 del urbanismo de la Misión Vivienda El Morro, en el sector Pablo VI de Petare, lo llaman "Titanic". Desde su inauguración, en diciembre de 2010, empezó a hundirse sin reparos, como si estuviese construido sobre arenas movedizas, marcando el desnivel con los otros inmuebles.

Nadie lo ocupó. Hubo intentos de invasión, fue sometido a estudios técnicos y las bases se reforzaron con materiales de construcción, pero el edificio no tenía remedio: había sido construido sobre una falla geológica.

El "Titanic", ahora, está siendo demolido por quienes lo construyeron. Es solo metal desnudo, escombros molidos, polvo en el aire, objetivo de destrucción para obreros.

Para Eduardo Páez-Pumar, ingeniero y presidente de la Asociación Integral de Políticas Públicas, el caso del urbanismo evidencia que no se están cumpliendo los procedimientos correctos de construcción: "Ningún proyecto puede carecer de estudios de suelos ni de planos estructurales y arquitectónicos. Son normas necesarias que deben ser consignadas en la alcaldía del municipio en el que se desea edificar, como primer paso. Luego, debe contarse con especialistas y materiales adecuados. No es lo mismo construir un edificio en el macizo guayanés que en Caracas, debido a que la calidad de los terrenos es distinta. La supervisión, igualmente, es indispensable".

En la Alcaldía de Sucre confirman que la Fundación Misión Hábitat, encargada de la obra, y las empresas contratistas no solicitaron permisos de habitabilidad antes de edificar. "Los proyectos no pueden ser manejados de forma aislada. Cuando no hay planificación, solamente se generan pérdidas", agrega Páez-Pumar.

Solo en la culminación de la terraza 10 -ejecutada por la contratista Mansercons-, donde está el "Titanic", se invirtieron 34.837.825 bolívares.

Desplazados. El Morro está condenado por los movimientos de tierra. Son pocos los inmuebles sin grietas, ventanas rotas, marcos de puertas desnivelados y pisos con hundimientos. En agosto, luego de los insistentes reclamos de los vecinos, el Ministerio de Vivienda empezó el desalojo de los edificios 2, 3 y 4 de la terraza 11.

"Nos están mandando a El Valle, Fuerte Tiuna y La Guaira. Algunos a refugios y otros a viviendas. Volvimos a quedar damnificados", indica un hombre en la entrada del empinado urbanismo.

María Pérez -como prefirió identificarse una antigua habitante de El Morro- ha sido amenazada por denunciar irregularidades en la construcción del urbanismo. "En este momento estoy en Caricuao; mudaron a 20 familias que estábamos hace mes y medio en la terraza 11. Querían enviarnos a zonas aisladas de nuestros trabajos, La Guaira y los Valles del Tuy, pero nos opusimos. En una oportunidad, el ministro de Vivienda, Ricardo Molina, nos contestó ante los reclamos: "¡Ah, entonces que se los coma un tigre!".

Los habitantes de la terraza 11 están afectados por los movimientos de tierra. "Es aterrador vivir allí. No hay noche que deje de escucharse el sonido de la tierra, que pareciera un volcán a punto de erupción", contó Pérez.

Anuncios ignorados. Las fallas en el complejo residencial son una advertencia de vieja data. Expertos, instituciones especializadas en riesgo -entre ellas la Fundación Venezolana de Investigaciones Sismológicas- y vecinos advirtieron sobre la inestabilidad de los terrenos desde 2003.

Gabriel D´Andrea, director de Protección Civil Sucre, es uno de los pocos funcionarios de la jurisdicción que ha podido entrar en El Morro, gracias a la invitación de residentes: "Siempre hemos advertido sobre la inestabilidad de los suelos. El año pasado logramos inhabilitar un polideportivo debido al riesgo; luego de varios meses desocupado, colapsó por completo. En ese caso, específicamente, se evitó una desgracia. Muchos vecinos suelen llamarnos preocupados debido a las fallas".

En el informe técnico número 006-03-13 de la División de Riesgos del Instituto de Prevención y Protección Ciudadana de la Alcaldía de Sucre queda constancia de que en dos inspecciones -hechas en agosto de 2012 y el 1° de marzo de este año- se evidenció la situación de vulnerabilidad del urbanismo: "Hay asentamientos pronunciados, grietas de tracción, percolación de agua de lluvias, desprendimientos y separaciones notorias de losas y juntas de dilatación, que son indicadores de inestabilidad del talud. Y se observan de manera, menos o más, acentuada en todas las terrazas del sector, posiblemente por modificaciones del relieve para ganar espacios urbanizables".

Obra acelerada. La construcción de El Morro comenzó en 2005. En la primera etapa de la obra se planificaron 740 apartamentos -de 72 metros cuadrados cada uno-, distribuidos en 8 terrazas. Aunque debió ser ocupado en 2008, solo se inauguró 2 años después.

"Al principio, teníamos muchas expectativas, resguardábamos el sitio. Teníamos esperanzas de que nuestras vidas iban a cambiar", contó una habitante del urbanismo.

El programa Aló, Presidente número 368 fue peculiar. El jefe del Estado, Hugo Chávez Frías, acudió el 19 de diciembre de 2010 a El Morro para entregar 120 apartamentos de la primera etapa. "No es lo mismo, allá en los ranchos aquellos, con construcción endeble, en terrenos que se van y se caen, que estar en estos apartamentos... El pueblo está mejorando su nivel de vida. Ustedes, que perdieron los ranchos, pero que ahora viven en tremendos edificios. Aquí, al frente, hay unos hermanos (en referencia al urbanismo privado El Encantado) que fueron estafados por la burguesía", dijo el mandatario.

Chávez pidió, en ese momento, celeridad en la culminación de El Morro, pero no era una solicitud nueva. Migdalia León, presidenta de la Fundación Misión Hábitat, acudió en junio de 2009 al urbanismo para supervisar las obras y exigirle a los representantes de las empresas contratistas Gusher, Masercon, Nania Nania Construcciones, Oficina Técnica Proinca, Construcciones Mavari, Constructora Pamorca, Proyectos y Desarrollos Villasmil e Inversiones RCBM 2021, que apresuraran el proyecto porque se había cumplido puntualmente con el compromiso de pago acordado.

Decadencia conocida

El gobierno ha visto de cerca la decadencia de El Morro, en el sector Pablo VI de Petare. El 6 de junio de 2012, en plena campaña por las elecciones presidenciales del 7 de octubre, los dirigentes del Partido Socialista Unido de Venezuela Aristóbulo Istúriz y Tania Díaz escucharon las quejas. "Hemos venido a visitarlos para la conformación del uno por diez. En todos aquellos hogares donde encontramos mayores de 18 años inscritos en el Registro Electoral, los invitamos a convertirse en militantes activos de la Misión de Octubre", dijo Istúriz.

Una vecina, que prefiere no identificarse, asegura que les pidieron solución para las fallas del urbanismo, pero no fueron atendidos. "Por acá pasan muchos políticos cuando se trata de buscar votos, pero pocas veces somos escuchados", señaló.
Fuente: EL Nacional

No hay comentarios:

Publicar un comentario